La innovación se debe proteger porque en estos tiempos modernos, la novedad es muy demandada y por ende, su contrapartida la copia, la sigue muy de cerca esperando que algún incauto genial, no haya tomado las medidas pertinentes para proteger su creación.
Al no proteger tu innovación, una vez que la pones al mercado ya no podrás decir que eso es tuyo, que sos el creador, no podrás evitar que otros lo copien y, si algún “avivado” la protege rápidamente, podrás encontrarte en la incómoda situación de no poder usar tu propia creación.
Un error común es subestimar tu propia inventiva y posponer esa protección a un futuro si “la cosa funciona” pero, cuando te das cuenta de que funciona, ya es muy tarde.
Tomemos en esta ocasión un Packaging, que puede ser muy innovativo tanto en su forma como en su estampado, en estos casos se debe proteger el modelo industrial para el primer caso o el diseño industrial para el segundo.
Si embargo, a veces, el diseño pasa a ser una insignia de la marca que representa y el publico relaciona ese envase o packaging con una marca determinada, en ese caso se debe registrar como marca.